Sunday, Mar 23, 2025 at 5:01 PM
March 23, 2025•694 words
Una de las cosas que realmente me enfurecen de toda la discusión con ciertas personas no creyentes o anticristianas es todo este asunto de que la Biblia o el cristianismo "se robó" ideas, conocimiento, patrones, motivos, etc. de otras culturas.
Este tipo de caracterización puede ser, hasta cierto punto, "benigno" en el sentido de que les ilustra a los creyentes que lo que dicen sus Biblias no es terriblemente original, ni tampoco algo único en la antigüedad. Sin embargo, la palabra "robo" debe entenderse como un recurso retórico para hacer un punto lo más evidente posible.
No obstante, es muy frustrante tener que lidiar con gente que se toma la hipérbole del "robo" demasiado en serio. Esto lo he visto de académicos que respeto mucho, lo he visto de amigos militantes ateos y humanistas, o de canales de YouTube. Por ejemplo, MythVision o History Valley son canales que yo respeto, pero a veces recurren a este recurso retórico. Por supuesto, hay otros irresponsables anticristianos que supuestamente "investigan la historia" (a veces lo hacen, pero cuando les da con sus rabietas anticristianas, la retórica y la mentira toman un lugar primordial, y la historia académica y responsable pasa a un segundo, tercer o último plano).
Ahora bien, lo que he hecho recientemente es que cuando alguien me viene con la idea de que la Biblia se "robó" relatos de otras civilizaciones, le invito a un reto: "Por favor, provéeme UN ejemplo, CUALQUIER ejemplo, en el que la Biblia o el cristianismo se 'robó' algo de los antiguos". Las respuestas son las típicas:
-Enuma Elish (Génesis 1)
-Yahveh le "robó" los atributos a Baal.
-Épica de Gilgamesh (Génesis 2-3).
-Isis, Osiris y Horus (Jesucristo).
-Dionisio (Juan - Bodas de Caná)
etc. etc. etc.
Inmediatamente, le respondo:
—Bien, me has mostrado que los judíos y cristianos durante la historia tomaron patrones, motivos, temas, ideas, etc. de otros lugares. Por favor, ¿puedes mostrarme su documento de propiedad sobre estos?
A esta pregunta, la persona puede quedar confundida. Por supuesto, no existen tales documentos. Tras la admisión de ello, le digo:
—Por lo tanto, el que los judíos y cristianos hayan tomado estos elementos culturales de otros NO es un robo, porque no se tomó PROPIEDAD de nadie. Se caería en la falacia del trato especial tener a la Biblia como rehén de esa retórica, sin ver que TODOS lo hacían; hasta lo hacían las mismas civilizaciones de las que supuestamente la Biblia se "robó" esas ideas y recursos culturales.
A la gente se le olvida que el robo consiste en la adquisición de una propiedad o bien de alguien para el provecho propio. El problema es que el "robo" tenía que ver con recursos escasos. Si yo me robo un pan de tu casa, tú lo pierdes y yo lo gano. El pan en sí es un recurso escaso. Pero si yo te doy una expresión o una idea, yo no la pierdo. Las expresiones, ideas y otras abstracciones culturales son recursos NO escasos.
Les enfatizo que en la cultura TODOS tomaban de TODOS, porque las ideas y otras abstracciones culturales eran libremente reproducibles y nadie se "robaba" los mitos de nadie.
¿Cuándo hablamos de "robo" de ideas o expresiones? Las patentes aparecen por primera vez en el siglo XV en Venecia, y los derechos de autor aparecen por primera vez en Inglaterra bajo el Estatuto de Ana en el siglo XVIII. Las patentes limitan artificialmente el uso de ciertas ideas (particularmente aquellas implementables a nivel tecnológico), y los derechos de autor limitan artificialmente y no de manera absoluta el uso de ciertas expresiones.
Y aun con todo eso, actualmente todos siguen utilizando legados del pasado y de diversas culturas. Asimismo, desde los artistas plásticos hasta los artistas gráficos utilizan ideas, expresiones, tropos y patrones del pasado a la hora de hacer su arte. ¿Es el color rojo original? No. ¿Es la idea de utilizar colores complementarios nueva? Tampoco. Igual pasa con la literatura, la música y otras áreas de la cultura.
Creo que es hora de pensar mucho más claramente y discutir cuán productivo es hablar de cómo la "Biblia" es la supuesta "ladrona" de otras culturas.